LA PRESIDENTA DE LAS JUNTAS GENERALES DE BIZKAIA RECIBE EN GERNIKA AL EMBAJADOR DE CUBA

 

  • De visita por Euskadi, Marcelino Medina González ha mostrado mucho  interés en conocer la historia y simbología que brota del Árbol de Gernika. 


(Gernika, a 21 de junio de 2022). El embajador de Cuba en el Estado español, Marcelino Medina González, se ha reunido hoy con la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui Biteri, en la Casa de Juntas de Gernika, en una cita que ha servido para mostrar al representante del gobierno cubano el patrimonio que cobija la sede parlamentaria foral y, en especial, su principal emblema: el Árbol de Gernika. 

Se está convirtiendo casi en una obligación que los representantes políticos de otros países hagan un parón en sus agendas para acudir a la Casa de Juntas de Gernika y conocer el legado histórico de este lugar que da cobijo al símbolo vasco más universal de paz y libertad. En esta ocasión, el embajador de Cuba se encuentra de visita en Euskadi para conocer el entramado político de la Comunidad y para reunirse con representantes políticos y empresariales, y no ha querido perderse la ocasión de conocer en persona la principal sede parlamentaria de Bizkaia.

La visita para conocer el Parlamento vizcaíno y el Árbol de Gernika se enmarca en una visita de carácter oficial a Euskadi, en la que además de su presencia en la Cámara foral, Medina espera reunirse estos próximos días con miembros del Gobierno vasco, partidos políticos, agencias de cooperación y de desarrollo, y representantes empresariales, entre otros colectivos. 

En su paso por Gernika, la Presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui, acompañada del miembro de la Mesa Emilio Lobato, ha recorrido con el invitado las distintas dependencias y puntos de interés de la sede oficial del Parlamento foral, como la Sala de la Vidriera, el salón de plenos o el amplio exterior ajardinado en donde emerge, junto a la tribuna juradera, el Árbol de Gernika, no sin antes detenerse en el templete del Árbol Viejo. La visita ha concluido con la firma en el Libro de Honor de la Casa de Juntas, tras un aurresku y una foto de familia junto al simbólico roble.