LA DIPUTACIÓN INFORMA EN LAS JUNTAS GENERALES DE UNA SANCIÓN DE 23.500 EUROS A LA RESIDENCIA ALBIZ SANTIAGO LLANOS, DE SESTAO
- La diputada de Acción Social, Amaia Antxustegi, comparece en la Cámara vizcaína, a petición de EH Bildu, para dar cuenta de distintos expedientes abiertos a esta residencia, que se han cerrado con la interposición de una multa de 23.500 euros por media docena de incumplimientos de la normativa de residencias.
- La oposición denuncia la situación “preocupante” de este centro residencial por sus “reiteradas” infracciones, tal y como recoge una reclamación firmada por 371 personas.
- Los grupos que apoyan al Gobierno foral respaldan el trabajo de la Diputación porque “todas” las quejas se han respondido, y porque los expedientes de seguimiento y de sanción abiertos demuestran que los sistemas de control e inspección del departamento de Acción Social “funcionan”.
(Bilbao, a 25 de febrero de 2025). Las Juntas Generales de Bizkaia han sustanciado hoy en comisión una doble comparecencia de la diputada foral de Acción Social, Amaia Antxustegi, solicitadas por EH Bildu, en relación a las “quejas y expedientes” presentados a las residencias de mayores Albiz Santiago Llanos, de Sestao, y Domus VI Arandia, de Arrigorriaga. En el primer caso, la responsable foral ha informado de que la empresa que gestiona el centro -el Grupo Babesten- ha recibido una sanción económica por media docena de incumplimientos, que suman un montante económico de 23.501 euros. La Diputación desestimó el pasado 13 de enero el recurso interpuesto por la empresa a dicha sanción.
La sanción económica se debe, según ha explicado Antxustegi, por incumplimientos de la normativa en la sujeción física de usuarios o usuarias sin prescripción facultativa, el ratio de personal o deficiencias en la atención sanitaria a un residente, así como por quebrantamientos en el mantenimiento de ciertas instalaciones. En concreto, el expediente sancionador, iniciado en mayo de 2024, que engloba dos expedientes de inspección por quejas y un expediente de oficio, establece cinco sanciones diferentes: “500 euros, por mantenimiento; 12.001 euros, por incumplimiento de ratio; 5.000 euros, por la restricción física sin prescripción; 3.000 euros, por una atención inadecuada a un residente; 3.000 euros, por incumplir en plazo algunas correcciones necesarias; y una amonestación por no haber actualizado un registro”, ha descrito.
Antxustegi ha dado detalles también de las quejas que durante los últimos años ha recibido la Unidad de Atención de Personas Usuarias en relación a esta residencia que cuenta con 134 plazas residenciales para personas mayores, y que han desembocado en la apertura de tres expedientes de seguimiento. La diputada foral ha señalado que durante el año pasado se recibieron 12 quejas, a las que habría que sumar otras dos que han entrado recientemente. “Todas han sido contestadas”, ha confirmado.
En la comparecencia, la responsable del área de Acción Social ha dado detalles sobre cada una de las reclamaciones interpuestas por familiares de las personas residentes en 2024. La de mayor calado fue recibida el 9 de abril. En un escrito firmado por “371” familiares, éstos denunciaron incumplimientos en ratios de personal, en los cambios nocturnos de absorbentes, y en deficiencias en la calidad de la comida, la limpieza o las sujeciones físicas. A través de otras quejas individuales, los familiares han constatado otras ineficiencias como la falta de atención médica, caídas, la inexistencia de suministros médicos o errores en la administración de medicamentos.
Los grupos de la oposición se han mostrado “preocupados” por los datos que ha ofrecido la diputada y por el incumplimiento “reiterado” de la normativa por parte de esta residencia. La solicitante de la comparecencia, la apoderada de EH Bildu Izaskun Duque, ha recordado las cifras de quejas y expedientes que el centro ha acumulado en el último lustro. Así, en el año de la pandemia (2020), se recogieron siete quejas; en 2021, fueron dos; en 2022,subieron a seis; en 2023 se alcanzó la cifra de cuatro; y en 2024, éstas se elevaron a doce.
Por su parte, los grupos que apoyan al Gobierno foral han respaldado el trabajo de la Diputación porque “todas” las quejas se han respondido y porque los expedientes abiertos demuestran que los sistemas de control e inspección del departamento de Acción Social “funcionan”, tanto por la información que llega a través de las inspecciones de oficio como por las que se ponen en marcha por quejas de familiares. Se hacen “más controles que nunca”, ha concluido la diputada, lo que repercute en que Bizkaia disponga de un “buen servicio residencial”.
Antxustegi ha concluido su primera comparecencia señalando que la “prioridad” de su departamento es que las personas residentes “estén bien atendidas”, por eso ha pedido a los familiares que usen la vía de las quejas, para que la Diputación “pueda hacer más inspecciones”. En cuanto a los ratios, la última inspección de oficio realizada a la residencia, del 7 de noviembre, constató que la residencia cumplía el ratio mínimo. La diputada ha reiterado la “dificultad” que tienen las residencias para contratar a personal del ámbito sanitario, especialmente en enfermería y medicina.
RESIDENCIA DOMUS VI ARANDIA
Por otro lado, respecto a la residencia Domus VI Arandia, de Arrigorriaga, que sobre ella pesaban denuncias de la plantilla “por la falta de seguridad y el incumplimiento de los ratios de personal”, según ha recordado la juntera Izaskun Duque, Antxustegi ha asegurado que el centro ha resuelto ya “todas las vulneraciones”. Un informe del servicio de Inspección y Control del departamento de Acción Social, fechado el 16 de enero, concluye que las deficiencias “han sido subsanadas”.
En concreto, una inspección de oficio realizada en el mes de septiembre había detectado deficiencias en el mantenimiento de timbres de aviso en algunos aseos, el deterioro de un sistema de sujeción física y la vulneración en el ratio mínimo de personal médico que la norma establecía en “1,27” y que el centro incumplía al llegar solo al “1”. En este aspecto, actualmente, la residencia cuenta con un ratio de “1,285”, ha confirmado Antxustegi.
