LA DIPUTACIÓN FORAL DE BIZKAIA HA ATENDIDO CADA AÑO A "140 PERSONAS REFUGIADAS" DESDE 2016
- La diputada foral de Empleo, Inclusión Social e Igualdad, Teresa Laespada, ha comparecido en las Juntas Generales para presentar el informe de evaluación del programa Goihabe.
(Bilbao, a 11 de marzo de 2020). Bizkaia ha atendido anualmente a “140 personas refugiadas” desde que en 2016 puso en marcha el programa Goihabe como consecuencia de la crisis migratoria originada en Europa por la guerra de Siria. La diputada foral de Empleo, Inclusión Social e Igualdad, Teresa Laespada, ha ofrecido este dato hoy en una comparecencia en las Juntas Generales de Bizkaia, en donde se ha hecho balance del informe de evaluación de este programa, destinado a integrar a las personas refugiadas en Bizkaia que huyen de la “guerra, las violencias y la hambruna”.
Goihabe es la respuesta que ofreció Bizkaia como territorio integrado en una “sociedad avanzada y solidaria” y “tenemos la obligación de dar respuesta digna ante la vulneración de derechos humanos” que sufren millones de ciudadanos y ciudadanas en el mundo. Es una respuesta “novedosa, polivalente y multidisciplinar” que se desarrolla en colaboración con las entidades Cruz Roja, CEAR-Euskadi, Cáritas y Fundación Ellacuría, y con procesos e intervenciones de diversa naturaleza, desde lo residencial a lo económico, pasando por lo educativo, social o laboral.
La apoderada de EH Bildu Izaskun Duque ha calificado de “insuficiente” esta respuesta teniendo en cuenta que la inversión inicial fue de “316.000 euros” en 2016 y el presupuesto para este año es de “300.000 euros”, y las peticiones de asilo, manejando datos de CEAR-Euskadi, pasaron de “285 personas” en 2016, a “3.395” en 2019. La juntera ha pedido que se rebajen los requisitos de la RGI para que estas personas puedan beneficiarse de estas ayudas.
Por su parte, Israel Escalenta (Elkarrekin Bizkaia) después de constatar que la Diputación no es competente en la materia y de felicitar a la institución foral por la iniciativa, ha criticado que haya personas “que no tienen techo asegurado” , y ha preguntado por las listas de espera y por la inclusión del colectivo venezolano en dicho programa.
En lo que respecta a los presupuestos, Laespada ha matizado que otros años las partidas se han ido incrementando en función de la situación “cambiante”. “A veces”, las necesidades de las personas refugiadas se cubren con los servicios que ofrece el Estado, ya que la administración general es la competente en la primera fase de acogida, de ahí que “nos mostremos prudentes” a la hora de establecer las partidas anuales, ya que el acogimiento al refugiado no es una competencia foral.
JÓVENES NO ACOMPAÑADOS
Por otro lado, en una comparecencia solicitada por Elkarrekin Bizkaia, grupo que pedía explicaciones sobre las medidas que prevé el departamento de Inclusión Social para responder a las necesidades que presentan jóvenes migrantes no acompañados en riesgo de exclusión social, la diputada ha anunciado que se han atendido a “826 jóvenes” de entre 18 y 23 años , desde julio de 2018.
Laespada ha explicado las medidas que su departamento ha puesto en marcha para atender a las personas que terminan su periplo en el servicio de infancia por cumplir los 18 años, y ha asegurado que “en la calle no hay ninguna persona que haya salido del sistema de protección de la Diputación”. Sin embargo, este extremo ha sido rebatido por la juntera de EH Bildu Izaskun Duque, quien ha señalado en base a “una encuesta realizada por el Gobierno vasco”, que el “21%” de las personas que están en la calle “principalmente en Bilbao y Ezkerraldea”, declararon que habían pasado por los servicios de infancia forales.
En relación a la puesta en marcha de nuevas medidas, Laespada ha anunciado un nuevo programa, dotado con “1.250.000 euros”, dirigido a mejorar la empleabilidad de jóvenes en riesgo de exclusión social que tiene carácter transversal, ya que afecta a su departamento y a Acción Social. Esta nueva línea de ayudas se articula en el programa Lanberri y se basa en el esquema de formación dual, o sea, formación y “prácticas remuneradas” en empresas.