LAS REFORMAS FISCALES DE BIZKAIA HAN CONTRIBUIDO A DISPONER DE MAYORES RECURSOS Y A CONSTRUIR UN TERRITORIO MÁS ATRACTIVO PARA LA INVERSIÓN Y LA CREACIÓN DE EMPLEO

• La Diputación presenta en las Juntas Generales de Bizkaia los resultados de los informes de la reformas fiscales que entraron en vigor en 2014 y 2018.
   
• La oposición critica las “formas” del Gobierno foral para comunicar dichas evaluaciones a la Cámara vizcaína y denuncia que el contenido de dichos informes es “parcial”.

(Bilbao, a 15 de enero de 2024). La diputada foral de Hacienda y Finanzas, Itxaso Berrojalbiz, ha presentado hoy en las Juntas Generales de Bizkaia, a petición propia y del grupo Mixto-Elkarrekin Bizkaia, las líneas generales del contenido de los informes de evaluación de la reforma del IRPF, que entró en vigor en 2014, y de la del Impuesto sobre Sociedades de 2018. Lo ha hecho cumpliendo con el “compromiso” adquirido por la Diputación de compartir su análisis con los grupos junteros, antes de iniciar el proceso para elaborar la próxima “revisión” fiscal que comenzará a fraguarse “en los próximos meses”. Como conclusión principal, Berrojalbiz ha asegurado que la primera reforma sirvió, entre otras cosas, para obtener mayores recursos económicos, y la segunda para reforzar el tejido empresarial del territorio y generar inversión y empleo.

En su intervención, Itxaso Berrojalbiz se ha mostrado muy satisfecha con los resultados obtenidos al constatar que el nuevo modelo de imposición directa en Bizkaia ha contribuido “de forma holgada” a lograr los objetivos que inspiraron su aprobación. Esto es, conseguir una Bizkaia “más moderna, solidaria, sostenible y competitiva”, mediante un sistema fiscal “más justo, más progresivo y más eficiente".

Respecto al cambio producido en el IRPF, el informe constata, según ella, el incremento del efecto redistributivo de este impuesto, elevando la presión fiscal de los y las contribuyentes con mayor capacidad económica, así como el fortalecimiento de los principios de “equidad y progresividad”. Esto es consecuencia de la aprobación de nuevos tipos impositivos para los tramos más altos de las tarifas y de ajustes de ciertos beneficios fiscales, reducciones y deducciones. 

La aplicación de un modelo de imposición de las personas físicas en Bizkaia a partir del año 2014, ha garantizado la “sostenibilidad y suficiencia” de las finanzas públicas del territorio durante estos años, con un incremento de la recaudación por este impuesto, de “más del 50%” con respecto al primer año de su entrada en vigor. Solo en el año 2022 el incremento se cifra en “117.205.067 euros”.

La diputada foral de Hacienda y Finanzas también ha destacado que esta reforma "ha contribuido a generar los recursos necesarios para mantener los distintos servicios públicos” competencia de las diferentes instituciones.

EVALUACIÓN  DEL  IMPUESTO SOBRE SOCIEDADES

Con relación al Impuesto de Sociedades, Berrojalbiz ha incidido en el complicado contexto económico en el que la reforma de este impuesto ha tenido lugar. Un contexto  marcado por una profunda crisis económica mundial y por las, cada vez más, crecientes necesidades para el mantenimiento del Estado de bienestar. Pese a esa coyuntura, la reforma "hizo que se potenciara su finalidad catalizadora de la reactivación de la actividad empresarial del País Vasco, fortaleciendo nuestro  tejido empresarial y la competitividad de las empresas de Bizkaia, sin olvidar, por supuesto, la  generación de empleo". La última revisión, acometida en 2018,  ha logrado convertir a Bizkaia en un territorio “más competitivo y atractivo” para las empresas.

Son varias las medidas adicionales adoptadas para lograr estos objetivos. Entre ellas, ha subrayado la alineación de los tipos nominales del impuesto al que tributan las empresas en Bizkaia con la media de la Unión Europea. La reforma del Impuesto de Sociedades también incluía un conjunto de medidas dirigidas a asegurar una tributación “mínima” por parte de aquellas empresas que generasen beneficios en su actividad y la creación de empleo estable y de calidad.

En este sentido, Itxaso Berrojalbiz ha subrayado que "este nuevo modelo de imposición de las empresas en Bizkaia ya consolidado, está actuando como tractor de la actividad económica y como generador de empleo. Y todo ello a pesar de la estrecha vinculación entre el Impuesto sobre Sociedades y la coyuntura económica en la que se desenvuelven las empresas ".

La recaudación obtenida por el Impuesto de Sociedades ha evolucionado de manera positiva  desde 2017 (año anterior a la culminación de la reforma), habiendo crecido en un “16%” hasta 2022. En el documentado presentado a los grupos junteros se ha trasladado que durante el año 2021 el impacto recaudatorio fue de “79.261.635 euros”.

En resumen, vistas las cifras y las consecuencias de dichas reformas, éstas dejan al Gobierno foral “muy satisfecho” al comprobar que se obtienen “más recursos económicos” con los que mantener el estado de bienestar y también un territorio “mucho más atractivo” para las empresas, la atracción de nuevas inversiones, y para “poner a las personas en el centro”.  En el caso del IRPF se reafirman sus principios de progresividad, redistribución y atención a la capacidad económica y a las circunstancias  personales de los y las contribuyentes. En el caso del Impuesto sobre Sociedades, se afianza su papel de refuerzo del tejido empresarial siendo tractor para la inversión y la generación de empleo en Bizkaia.

Por su parte, los grupos junteros Mixto-Elkarrekin Bizkaia y EH Bildu han criticado “las formas” planteadas por la Diputación a la hora de presentar estas evaluaciones, ya que  no han recibido los informes completos, cuando éstos fueron remitidos el 27 de diciembre al Órgano de Coordinación Tributario, ha denunciado Arantza Sarasola de EH Bildu. Además, el contenido del mismo es “muy parcial” ya que se analiza solo la variante recaudatoria, cuando en su día la Diputación se comprometió a traer a las Juntas Generales una evaluación “completa” sobre el sistema fiscal de Bizkaia. Berrojalbiz ha respondido que el compromiso del Gobierno foral fue el de realizar un “análisis cuantitativo” de las dos reformas mencionadas.